(icono) No Borrar
OPINIóN |
![]() ElPost publica columna de Soledad Teixidó sobre el Ranking Nacional de RSE 2012El portal ElPost se hace eco de la premiación del Ranking Nacional de RSE PROhumana 2012, publicando una columna de Soledad Teixidó en la cual se hace un repaso a la evolución de la RSE en Chile, incidiendo en el aporte que el Ranking realiza a las gestión integrada de la empresa. A continuación, reproducimos la columna completa. La humanidad se está transformando, tanto en los seres humanos que la componen, como en las sensibilidades de los mismos. Esto está ocurriendo fundamentalmente por los cambios que hemos enfrentado tanto en lo tecnológico como en el acceso a la información y la redefinición de la economía, teniendo esto consecuencias sociales, políticas y culturales. Pero especialmente en lo económico todavía no está claro cuáles son las avenidas que se escogerán. Hoy es posible observar distintas maneras de hacer economía, desde el modelo más tradicional hasta formas muy progresistas que hablan de un total cambio de paradigma en el modo de comprender y desarrollar las economías y generar riquezas. De lo que no cabe duda es que si antes como seres humanos sabíamos cognitivamente que éramos parte del planeta tierra, hoy la tecnología nos permite sentir corporalmente que somos parte del mundo interactuando con la mayoría de nuestros sentidos de manera simultánea: el otro, la naturaleza, tienen imagen, corporalidad y sonidos que antes para la gran mayoría eran desconocidos. Esto ha sido rápido y ágil y en los últimos años hemos sido testigos de este cambio vertiginoso, especialmente observando la evolución que ha tenido en Chile y globalmente la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) dentro del desarrollo humano sustentable y como ha impactado en las personas, las instituciones, gobiernos y empresas. Podemos ver que al inicio del siglo XXI, la comprensión y práctica de la RSE era un hecho aislado y acotado, transitando hoy a un modo de gestionar más masivo, midiendo el desempeño de las empresas integralmente responsables en lo que se conoce como sustentabilidad económica, social y ambiental. Hoy es posible observar que la RSE ha ido generando el ambiente adecuado para acunar una ética empresarial, que nos permitirá aunar valores y visiones de lo que deseamos como marco para el desarrollo de nuestras sociedades y del ser humano. Garantizando el cuidado, respeto y bienestar y considerando, además, aspectos que pasan también por cuidar y mejorar el entorno en que vivimos. Hoy surgen alianzas entre representantes del sector empresarial, gubernamental y de la sociedad civil que comienzan a germinar las bases de la nueva economía que requerimos para las demandas de este cambio de paradigma que estamos viviendo. De la misma forma que se va cuestionando el actual modelo de crecimiento que nos rige, avanzando en la inclusión de variables que van más allá del crecimiento económico, como la inclusión, derechos ciudadanos, salud y otros. Y es en este contexto que la empresa de hoy no se puede entender más por partes o desarticuladamente, eso ya es historia del pasado; este es uno de los grandes retos que debe enfrentar Chile y en especial sus líderes empresariales. O agilizamos el paso en esta renovada forma de entender el hacer empresa o pasaremos a ser parte de cifras que nos pondrán entre los países menos desarrollados. Es posible constatar que existe una tensión entre los que no quieren comprender que la tecnología no solo es avance científico o productivo, sino que también es ciudadanía informada y participativa, donde se plantean escenarios diversos de construcción democrática y, por sobre todo, de un cuestionamiento al modelo económico, donde por cierto la RSE o la sustentabilidad económica, social y ambiental son una forma que coordinan este cambio radical en el modo de ser y hacer empresa y de cómo se crea riqueza a nivel local y global. Ciertos sectores de la empresa nacional, muestran algunas señales de cambio, sin embargo lo que caracteriza hoy a un grupo es su reacción reactiva a los hechos, en especial a la voz y empoderamiento de la ciudadanía y sociedad civil, y/o demandas y exigencias ambientales. Más aún, sobresaliendo el hecho de que este mismo grupo de empresas en Chile no entiende su rol en la sociedad, y sigue viéndose a sí misma como un agente productivo y focalizado en sus propios intereses de rentabilidad económica. Hace algunas semanas se dio a conocer el Ranking Nacional de RSE PROhumana, que se plantea como una metodología que aporta a la gestión integrada de la empresa, considerando las tendencias y exigencias globales. Las organizaciones que participan anualmente se destacan en relación a sus pares, lo que es posible comprobar a través de la evaluación que hacen sus empleados y de la certificación de la integralidad de la implementación de cada una de sus políticas tanto en el ámbito económico, social y ambiental creando crecimiento y riqueza sustentable. Por último, y mirando hacia lo que viene, el reto de la segunda década del siglo XXI es que generemos una sociedad donde cada persona tenga acceso a un entorno que provea de una distribución económica y social equitativa, donde la competitividad responsable sea el eje para su implementación. Esto permitiría detener la actual distribución de recursos en que la mayoría de los ciudadanos de este planeta queda fuera. Conjuntamente modelemos esta nueva forma de construir nuestra sociedad donde las promesas y acuerdos de las últimas décadas se muevan hacia un modo de hacer las cosas que esté orientado a la acción y al cambio rápido y justo dentro de este nuevo modelo de desarrollo económico humano sustentable. VÍA/ELPOST |
Agregar un comentario